
Y S., en 1º de Bachiller, preguntó... Y sus terribles palabras provocaron que el mundo parara, que las nubes oscurecieran, que los animales callaran. Su terrible cuestión sonó como la bomba más terrible, como la canción menos gloriosa, como el grito más aterrador...:
Entonces maestro, si la definición te la ponemos con nuestras palabras ¿pasa algo?
Y Eladio tembló.
Visitad este blog para encontraros con definiciones con vuestras propias palabras.