
Las actividades se desarrollaron con más o menos éxito (perdón si me dejo alguna en el tintero):
- Los crépes un año más volvieron a recaudar muchas “pelas solidarias”.
- El chocolate de la cantina con la torta o coca boba estuvo de vicio.
- En la actividad de juego en red de informática, también había cola, por lo que supongo que gustó bastante.
- Los móviles, bolsos y plumas que se realizaron en el laboratorio de ciencias fueron también un éxito de asistencia puesto que, incluso, se quedaron sin ciertos materiales para realizar más productos.
- En el fútbol de video consola estaban bastante tranquilos.
- En el karaoke algunos perdieron la vergüenza (más bien algunas).
- Los alumnos árabes, más bien alumnas, realizaron deliciosos dulces y té. La asistencia de profesores fue masiva (gorrones) pero mi duda es ¿por qué asistieron tan pocos alumnos que no fueran árabes?
- El pasaje del terror (o como demonios se llamara) tuvo un éxito inusitado, había una gran cola. Parecía que iba a haber una actuación de Andy y Lucas o de los Jonasitos Brothers. Comentarios de diversos alumnos sobre lo que te encontrabas en el interior: arañazos, vísceras, sangre, gente andando por el suelo (¿?), bastones, olor nauseabundo… No me atreví a entrar, lo confieso. Por otra parte, algunos profesores argumentaban que ya entran al pasaje del terror todos los días cuando deben de dar clase en cierta aula de ese pabellón de bachillerato.
- De los partidos de fútbol-sala no vi demasiado. Sólo, que si yo fuera portero, no me pondría delante de David y que Toni marcó un magnífico gol (en propia puerta).
- El partido de chicas de hockey fue más entretenido. Mientras que un equipo iba uniformado y corría de vez en cuando, el otro parecía que había ido a un pase de modelos y se dedicaban dialogar entre ellas hasta que pasara cerca de ellas la pastilla.
- En el buzón del amor había cantidad de gente esperando recibir su correspondiente mensaje.
Y poco más: una visita de un alumno que había dejado el instituto y que ahora está en arte y que está contento con el cambio, partes por fumar en el recinto, gente que se iba antes del comienzo de las actividades porque no les atraía ninguna, un chaval llorando a las 12:30 porque su madre había venido a por él y no se quería marchar, una alumna que parecía una tortuga-ninja con una mochila enorme para llevar su cámara…
...y Martín y Eladio haciendo “el Michael Jackson” en el aula de música y nadie nos visitó… bueno sí, Crespo y Fina.